En once años el billete de 100 pesos perdió casi el 90% de su poder de compra



Con el aumento de los precios en más de 38% en 2014 la moneda nacional de máxima denominación equivale a menos de 13 pesos de 2003. El desequilibrio fiscal y la emisión desmedida fueron los responsables de la devaluación del peso
UEVES 15 DE ENERO 2015



Usualmente se habla de devaluación del peso en referencia al valor de otra divisa, principalmente el dólar, porque se ha convertido en el seguro refugio de la cada vez más menguada capacidad de ahorro de los argentinos. Sin embargo, una manera más simple de medir el fenómeno es la pérdida de capacidad de compra de bienes y servicios del peso, sea en la nominación que fuere, mes a mes, año tras año.
Un día antes de que el Indec dé a conocer la variación del Índice de Precios Nacional Urbano para el área metropolitana, un grupo de legisladores de la oposición comunicó el resultado de la tasa deinflación en diciembre último: 1,87%, y el promedio correspondiente a todo el 2014, que ascendió a poco más del 38 por ciento en comparación con el año anterior.
Eso significó que en el término de doce meses el poder de compra de cien pesos se redujo a 72, es decir que se necesitan 38,5 por ciento más de pesos para adquirir la misma cantidad de bienes y servicios, o recortar el consumo en casi un cuarto del que se tenía un año antes, con el billete de máxima nominación vigente.
El ejercicio resulta más dramático si, como hizo el economista Roberto Cachanosky, se observa el ritmo de depreciación del billete de máxima nominación desde que en 2003 se comenzó a dejar atrás la crisis que provocó la ruptura de la convertibilidad sin plan y con default, hasta hoy. En el primer año pasó a valer 94,3 pesos en términos de poder de compra, al siguiente descendió otro escalón a 83,9 y cayó a 76,4 en el siguiente, y desciende al fin del mandato del presidente Néstor Kirchner en 2007 a 60,8, al acelerarse la inflación ese año de 9,8 a 25,7 por ciento.
EN EL ÚLTIMO AÑO EL PESO PERDIÓ MÁS DE UN CUARTO DE SU VALOR
Con la llegada de Cristina Kirchner el proceso logra sostenerse en un ritmo de deterioro por año de 23 a 28%, sólo atenuado a 14,8% con la mini recesión de 2009. Pero se intensificó en el último año al volar los precios promedio de la economía 38,5%, lo que redujo el valor del billete de cien pesos de 2003 a menos de trece pesos de entonces. Esto significa que los bienes y servicios que hoy cuestan 100 pesos, once años atrás se los obtenía con sólo 12,6 pesos.
Roberto Cachanosky analizó en InfobaeTV cómo se deprecia la moneda con la emisión que provoca el déficit fiscal
Y dado que la autoridad monetaria se resiste a imprimir billetes de mayor nominación para facilitar las transacciones, bajo el argumento de que de ese modo induce a la bancarización de la población -uso de la tarjeta de débito bancario, aunque hoy no es aceptada en gran parte de los centros turísticos-, la Casa de la Moneda no da abasto para reponer los papeles que se deterioran por su uso intensivo; los cajeros automáticos de los bancos no alcanzan a responder a la demanda del público, y se terminan rompiendo, generando un trastorno adicional a la población al que enfrentan por la falta de moneda de baja nominación.
EL BANCO CENTRAL SE RESISTE A IMPRIMIR BILLETES DE MAYOR NOMINACIÓN, PESE A QUE EQUIVALE A 7,3 DÓLARES Y 6,4 EUROS
Otra forma de analizar el deterioro del poder adquisitivo del peso es compararlo con la cotización del dólar en la plaza local. Así, mientras que en 2003 con cien pesos se podían adquirir en forma libre y legal, en un banco o casa de cambio, 33 dólares, once años después sólo uno por ciento de la población es autorizado a comprar menos de 10 dólares con esa cantidad de dinero en el circuito que valida la AFIP; mientras que el resto debe acudir al mercado libre o a sofisticadas transacciones en Bolsa con bonos y acciones y apenas recibir entre 7 u 8 dólares.
En esos casos, el peso perdió en once años dos tercios de su valor, al cambio oficial, y casi el 80% en el segundo. La diferencia entre ambos, explica el atraso de la paridad cambiaria y la pérdida de competitividad de la producción nacional en los mercados internacionales, fenómeno que se manifiesta en la caída sostenida de las exportaciones, agravada por el cepo a las importaciones.
EN TÉRMINOS DE DÓLARES, EN ONCE AÑOS EL PESO PERDIÓ ENTRE EL 65 Y 80% DE SU VALOR
El principal responsable de la acumulación de una inflación del 700 por ciento en once años, a un ritmo acumulativo anual del 20,7 por ciento que ha hecho que en ese período la moneda perdiera más del 87 por ciento de su valor para equivaler a 12,6 pesos de 2003, fue la indisciplina fiscal de gastar mucho más de lo que se recauda, sin contar con otra fuente relevante de financiamiento que la emisión espuria del Banco Central.

INFLACIÓN

Con $200/u$s200 en 2001 comprabas 286 kilos de pan frances ($0,70 el kilo de primera calidad)
Con $4500/u$s372 en 2015 compras 180 kilos de pan frances ($25 el kilo de primera calidad)

Tomar el precio del pan francés es un método clásico/histórico para medir el poder adquisitivo, podemos ver que aunque ganamos más dinero nuestro poder adquisitivo es menor, una de las causas de una inflación alta durante varios años.




CONSUMO

23.11.2014

FUENTE: TELAM 


Los trabajadores de menor ingreso mejoraron su poder de compra desde 2001 en todos los productos

Los trabajadores, que representan a un quinto de la masa de asalariados del país, mejoraron su poder de compra en todos los bienes y servicios de la economía, aseguró un análisis del Grupo de Estudios de Economía Nacional y Popular (Geenap).

 El informe, elaborado por los economistas Sergio Soloaga y Aixa Ratta, destacó que observando el salario mínimo de 2001, determinado en $200, en relación al actual de $4.400, "estamos frente a un incremento de 2.100%".

"Este segmento, que destina cotidianamente una mayor parte de su salario a la compra de bienes de consumo, logró en los últimos años mayores posibilidades de acceso a bienes y servicios, en función de los aumentos sistemáticos logrados a partir de las negociaciones colectivas de trabajo", indicaron los analistas.

Asimismo remarcaron que "no sólo aumentó el poder adquisitivo del salario en estos últimos 13 años, sino que también aumentó el número de trabajadores", y precisaron que "la tasa de desempleo en 2001 ascendía a 25% mientras que en el segundo trimestre del 2014 fue de 7,5%".

El informe asegura que, observando el salario mínimo de 2001, determinado en $200, en relación al actual de $4.400, "estamos frente a un incremento de 2.100%"
El trabajo del Geenap hizo un ejercicio, tomando como indicador para reflejar los aumentos de precios, un empalme entre diferentes series oficiales y no oficiales, de 7 provincias más el de la consultora de Miguel Bein, "garantizando la robustez de los resultados obtenidos y una buena medida de comparación en términos de mostrar el escenario más negativo".

Así las cosas, los datos reflejan que los salarios nominales de los trabajadores aumentaron en una cifra que supera 900% mientras que los precios, en base al índice, solo aumentaron 598%, considerando la evolución entre 2001 y 2013.

"Los resultados aún son más elocuentes considerando la evolución entre 2003, cuando asume la presidencia Néstor Kirchner, y 2013. En ese lapso, el salario nominal de los trabajadores registrados aumentó en un 741% mientras que los precios se incrementaron en un 389%.", remarcaron los economistas.

Así subrayaron que "lo que se deriva de estas cifras son incrementos de los salarios en términos reales que van desde el 42,9% considerando los años posteriores a la crisis, hasta el 71,5% tomando solo el periodo de gobierno kirchnerista".

Es decir que el salario que cobran los trabajadores en la actualidad les permite acceder a un 42,9 % y un 71,5% más de bienes que en aquellos años de crisis y desempleo.

De acuerdo al análisis, existen sectores que lograron casi duplicar sus salarios en términos reales.

"Por ejemplo desde 2003 hasta 2013 el sector sanidad experimentó una variación positiva de sus ingresos laborales en términos reales del 98%. Del mismo modo otros sectores, como seguridad, indumentaria, maestranza, construcción, comercio y transportes de pasajeros se beneficiaron por variaciones superiores al 80% en sus ingresos reales", puntualizaron Soloaga y Ratta.

Pusieron de relieve que "el caso extremo es el de los camioneros que desde 2003 consiguieron incrementos reales del 122%".

"Comparando la evolución de los precios y los salarios durante los últimos años nos permite de algún modo dimensionar las bases del proyecto económico con inclusión social iniciado en 2003", afirmaron los economistas.

Señalaron que "los cimientos del modelo se encuentran en una clase trabajadora con un poder adquisitivo creciente y sostenido a lo largo de los años que permita dinamizar el mercado interno y al mismo tiempo garantizar un mejor nivel de vida para la población".

El relevamiento asimismo evaluó lo que sucedió con los deciles de la población que reciben los ingresos más bajos, el primero y el segundo, y concluyó que "los aumentos punta a punta (2001-2014) son excepcionalmente grandes".

En ese sentido, los economistas remarcaron que "se verifica un incremento para el primer y el segundo decil de 2.250% y 1.500% respectivamente", y aseguraron que "estos porcentajes son ampliamente superiores a cualquier índice de precios o aumento de productos individuales de bienes o servicios en el intervalo de tiempo analizado".